"No hay decisiones buenas y malas, solo hay decisiones y somos esclavos de ellas." (Ntros.Ant.)

sábado, 30 de junio de 2012

MITOLOGIA BABILONIA -HIMNO A ISHTAR (II)-


MITOLOGIA BABILONIA
HIMNO A ISHTAR (II)

por Federico Lara Peinado


¡Exaltad, magnificad a la divina Señora de Nínive!
¡Engrandeced, glorificad a la divina Señora de Arbelas!
¡Que no tenga igual entre los grandes dioses!
Su nombre es querido a las diosas,
5 – Todas las capillas de sus lugares santos están sin su igual,
Lo que dicen sus labios es un Girra flameante, 
Sus palabras son reverenciadas por todos.
En cuanto a mí, Assurbanipal, hacia quien se dirige su corazón,
[…] Nínive,
10 – Criatura del Bit Ri[duti (casa de sucesión), restaurador de]l Egashnkalamma,
De quien [ellas han exal]tado la realeza desde el Bit [Riduti],
Con cuya boca pura [ellas orden]aron que perdurase mi trono.
Yo no conocí ni padre ni madre humanos (afirmación totalmente falsa, Assurbanipal fue hijo de Assarhaddon  y de una esposa que su nombre se desconoce), crecí como mis diosas;
Los grandes dioses me han dirigido como a un niño pequeño,
15 – Me han acompañado sin cesar a (mi) derecha y a (mi) izquierda,
Han colocado a mis lados a un buen Shedu y a una buena Lamassu,
Han confiado mi aliento a unos vigilantes  de la salud y la vida,
[Han hecho espléndida] mi estatura, han reforzado mi vigor,
Han hecho mencionar mi nombre más que (el de) todos los príncipes.
20 – Ellos se ponen […], ellos vacilan con temor;
[a los paí]ses rebeldes que no se habían sometido a los reyes, mis padres
[Y] a los que ellos no habían impuesto [tributo ni] ofrenda,
[Yo], Assurbanipal, criatura de las manos de los grandes dioses,
[…] poderosamente.

Una laguna de un número indeterminado de versos impide traducir el comienzo del reverso.

[…]
[…] su orden,
[…] sus palabras.
No ha sido [por] mi [fuer]za ni por la fuerza de mi arco,
(sino) por el vi[gor y] por la fuerza de mis diosas,
5´- Que he sometido al yugo de Assur a los países que me habían sido in[dócil]es.
Cada año, sin cesar, conducen dones [abundantes]
Y se mantienen  cada día en la gran puerta de Assur y de Ninlil.
Con la imploración y la súplica buscan mi paz,
Con la demanda y la plegaria abrazan mis pies.
10´- A mí, Assurbanipal, de descendencia real,
[que ab]ate a los rebeldes, que calma el corazón de los dioses,
Los grandes dioses me han alentado y han bendecido mis armas.
La divina Señora de Arbelas ha ordenado que haya buenas disposiciones respecto a mí.
Ellas (me) han fijado por destino una vida perpetua y el ejercicio de la soberanía sobre todos los lugares habitados
15´- A cuyos reyes han sometido a mis pies.
¡Que la divina Señora de Nínive, la Señora de los cantos, exalte (mi) realeza a perpetuidad!

domingo, 24 de junio de 2012

MITOLOGIA AZTECA -LA VAINILLA-


MITOLOGIA AZTECA
LA VAINILLA

Una iniciativa de la Universidad de Guadalajara y Fielding Graduate University



Hace mucho, pero mucho tiempo, los totonacas emigraron de Teotihuacan y se asentaron en las costas de Veracruz, allí construyeron el reino de Totonacapan. Los jefes de aquel pueblo levantaron centros de adoración a sus dioses, entre las que sobresalía Tonacayohua, que cuidaba la siembra, el pan, y los alimentos.
En la cumbre de una de las más altas montañas cercanas a Papantla, tenía su templo Tonacayohua en donde estaban encargadas seis mujeres pobres que desde niñas eran dedicadas especialmente a ella y que hacían la promesa de no casarse jamás.
En tiempos del rey Tenitztli, nació de una de sus esposas, una niña bellísima a la que llamaron Lucero del Alba. Su padre la entregó a la adoración de la diosa para que ningún mortal se le acercara.
Un hermoso príncipe llamado Joven Venado, se enamoró de ella. Sabía que poner sus ojos en la doncella era un pecado castigado cortándole la cabeza. Un día que Lucero del Alba salió del templo para recoger palomas y ofrendas a la diosa, su enamorado la raptó y huyó con ella a lo más escondido de la montaña.
De pronto se les apareció un horrible monstruo que los envolvió con oleadas de fuego y los obligó a retroceder. Al llegar al camino, ya los sacerdotes los esperaban y, el príncipe y la princesa fueron degollados de un solo tajo. Sus cuerpos, aún calientes fueron llevados hasta el lugar de adoración. Allí, tras extraerles los corazones, fueron arrojados en el altar de la diosa.
En el lugar que se les sacrificó, la abundante hierba empezó a secarse, como si la sangre de las dos víctimas allí regada fuera una maldición. Pocos meses después, volvió a brotar un arbusto, pero tan maravilloso, que en unos cuantos días se elevó varios centímetros del suelo y se cubrió de espeso follaje.
Cuando creció totalmente, comenzó a nacer junto a su tallo una orquídea trepadora. Una mañana se cubrió de pequeñas flores y todo aquel sitio se llenó de exquisitos aromas.
Atraídos por aquel suceso maravilloso, los sacerdotes y el pueblo no dudaron ya de que la sangre de los dos príncipes se había transformado en un arbusto y orquídea. Y su asombro creció aún más cuando las florecillas se convirtieron en largas y delgadas vainas, que al madurarse, despedían un perfume todavía más fuerte y penetrante, como si el alma inocente de Lucero del Alba se hubiera convertido en la fragancia más exquisita.
La orquídea fue objeto de culto; se le declaró planta sagrada y se elevó como ofrenda divina hasta los lugares de adoración totonaca.
Así, de la sangre de una princesa, nació la vainilla que en totonaco es llamada Caxixanat (flor recóndita) y en azteca Tlixóchitl (flor negra).

martes, 19 de junio de 2012

MITOS HEBREOS -MUERTE DE ABRAHAM-


MITOS HEBREOS 
MUERTE DE ABRAHAM

POR ROBERT GRAVES y RAPHAEL PATAI


Abraham murió a la edad de ciento setenta y cinco años.
Sus hijos Isaac e Ismael lo sepultaron junto a su esposa Sara, en la caverna de Macpela.
Había elegido ese lugar de entierro porque cuando los tres ángeles lo visitaron en Mambré y él corrió a matar un ternero, éste huyó a refugiarse en la oscuridad de la caverna. Siguiéndole de cerca, Abraham se encontró con Adán y Eva acostados el uno junto al otro como si durmieran; unas candelas ardían sobre
ellos y una dulce fragancia llenaba el aire.
No mucho antes de la muerte de Abraham, Isaac e Ismael celebraron la Fiesta de los Primeros Frutos con él en Hebrón y ofrecieron sacrificios en el altar que él había erigido allí. Rebeca coció tortas con maíz recién cosechado y Jacob las llevó a Abraham, quien, mientras comía, daba gracias a Dios por su felicidad.
También bendijo a Jacob, advirtiéndole que no se casara con una cananea y, al mismo tiempo, le legó la casa de las cercanías de Damasco llamada todavía la "Casa de Abraham". Luego se acostó, se acercó a Jacob y le dio siete besos en la frente, después de lo cual utilizó dos de los dedos de Jacob para cerrar sus propios ojos, se los cubrió con una colcha, se estiró y murió tranquilamente.
Jacob se durmió en el pecho de Abraham, hasta que, cuando despertó unas horas después, lo encontró frío como el hielo. Anunció la muerte a Isaac, Rebeca e Ismael, todos los cuales se lamentaron en voz alta y poco después enterraron a Abraham en la caverna, donde lo lloraron durante cuarenta días. Dios había acortado en cinco años la vida de Abraham para que pudiera morir sin enterarse de las maldades de Esaú.
Sin embargo, algunos dicen que Abraham luchó con la muerte no menos vigorosamente que Moisés posteriormente, pues cuando Miguel fue en busca de su alma insistió audazmente en ver antes el mundo entero. En consecuencia, Dios ordenó a Miguel que dejara a Abraham recorrer los cielos en un carro tirado por un querubín, para que satisfaciera así su deseo, pero Abraham seguía negándose a morir.
Entonces Dios llamó al Ángel de la Muerte y le d i j o : "Vamos, Muerte cruel, oculta tu ferocidad, vela tu pestilencia y, revestida de juventud y gloría, desciende y tráeme a mi amigo Abraham", Abraham recibió al ángel hospitalariamente, pero, sospechando que aquel joven bello podía ser la Muerte, le pidió que mostrara su verdadero aspecto. La Muerte lo hizo. Abraham se desmayó horrorizado y murmuró cuando recobró el sentido: "¡Te pido en nombre de Dios que vuelvas a ponerte tu disfraz!" La Muerte obedeció y dijo engañosamente: "Ven, amigo, toma mi mano y deja que la lozanía y la fuerza vuelvan a t i " . Asió los dedos que le tendió Abraham y por medio de ellos le sacó el alma, que Miguel envolvió en un pañuelo divinamente tejido y llevó al cielo.

MITOLOGIA GRIEGA -LAS CINCO EDADES DEL HOMBRE-


MITOLOGIA GRIEGA 
LAS CINCO EDADES DEL HOMBRE

por ROBERT GRAVES


Algunos niegan que Prometeo creara a los hombres, o que algún hombre brotara de los dientes de una serpiente. Dicen que la Tierra los produjo espontáneamente, como el mejor de sus frutos, especialmente en la región del Ática, y que Alalcomeneo fue el primer hombre que apareció, junto al lago Copáis en Beocia, incluso antes que existiera la Luna. Actuó como consejero de Zeus, con ocasión de su querella con Hera, y como tutor de Atenea cuando ésta era todavía una muchacha.
Estos hombres constituían la llamada raza de oro; eran súbditos de Crono, vivían sin preocupaciones ni trabajo, comían solamente bellotas, frutos silvestres y la miel que destilaban los árboles, bebían leche de oveja y cabra, nunca envejecían, bailaban y reían mucho; para ellos la muerte no era más terrible que el sueño.
Todos ellos han desaparecido, pero sus espíritus sobreviven como genios de los felices lugares de retiro rústicos, donantes de buena fortuna y mantenedores de la justicia.
Luego vino una raza de plata, comedora de pan, también de creación divina. Los hombres estaban completamente sometidos a sus madres y no se atrevían a desobedecerlas, aunque podían vivir hasta los cien años de edad. Eran pendencieros e ignorantes y nunca ofrecían sacrificios a los dioses, pero al menos no se hacían mutuamente la guerra. Zeus los destruyó a todos.
A continuación vino una raza de bronce, hombres que cayeron como frutos de los fresnos y estaban armados con armas de bronce. Comían carne y pan, y les complacía la guerra, pues eran insolentes y crueles. La peste terminó con todos.
La cuarta raza de hombres era también de bronce, pero más noble y generosa, pues la engendraron los dioses en madres mortales.
Pelearon gloriosamente en el sitio de Tebas, la expedición de los argonautas y la guerra de Troya. Se convirtieron en héroes y habitan en los Campos Elíseos.
La quinta raza es la actual de hierro, indignos descendientes de la cuarta. Son degenerados, crueles, injustos, maliciosos, libidinosos, malos hijos y traicioneros.

domingo, 17 de junio de 2012

TESTAMENTO DE MOISES


Testamento de Moisés
(fragmento)(1) 

Por Antonio Piñero





Esta obra, llamada también Asunción de Moisés, contiene una parte que es un apocalipsis. El escrito en su conjunto recoge las palabras de adiós de este personaje, antes de morir, a su sucesor Josué, que sirven como su testamento. En esta alocución Moisés predice la historia de Israel desde la entrada en el país de Canaán hasta el final de los tiempos. El texto se nos ha transmitido incompleto, y hace una insistencia especial en los hechos que van desde el rey Herodes el Grande hasta la quema de una parte del Templo de Jerusalén en la primera revuelta de los judíos (tras la muerte de Herodes en el 4 a. de C.), que acabó trágicamente con la muerte de muchos israelitas a manos de los romanos. Según el autor, tras estos hechos vendrá pronto el fin del mundo.
El análisis del contenido de la obra lleva a la conclusión de que su autor pertenecía a un medio sectario judío con una mentalidad afín  a los esenios, aunque no necesariamente vinculada a la ideología especial de los esenios de Qumrán, que formaron probablemente un grupo aparte dentro de la secta. Este autor está convencido de vive al final de los tiempos.
La obra se debió componer en Israel poco después de los últimos acontecimientos recogidos por ella –hechos presentados como una profecía, naturalmente-. Por tanto, entre los años 7 y 30 de nuestra era.
Aunque se nos ha conservado solo en latín y en un único manuscrito, el texto es una traducción del griego, el cual, a su vez, se remonta a un material semítico en hebreo o arameo.
Lo más original de este “testamento” es que presenta una doctrina escatológica sin mesías. El enviado celestial, que introduce los últimos tiempos, es una figura angélica, y el misterioso personaje que con su recto proceder hace que Dios apresure el final del mundo es un levita, llamado Taxo, que tiene una función mesiánica: es simplemente la figura ideal de un judío piadoso, que cree que en la retribución final divina y que está dispuesto a sufrir incluso el martirio por ser fiel a la Ley y a la alianza con el Dios de Israel.


(1) Lamentablemente por el momento me es imposible publicar el texto completo como siempre fue mi proceder, pero dado la importancia de esta obra, juzgue conveniente hacerlo así. 
Espero que el lector sepa comprender y valorizar el texto ofrecido. – Sergio (Nuestros Antepasados)

La guerra anterior al fin de los tiempos.
Entonces se alzarán contra los justos reyes poderosos que serán llamados sacerdotes del Altísimo, pero realmente obrarán la impiedad desde el santuario santo. Y les sucederá un rey insolente que no será del linaje de los sacerdotes, hombre audaz y descarado que los juzgará como se merezcan. A espada eliminará a los principales de entre ellos y en lugares desconocidos hará desaparecer sus cuerpos, para que nadie sepa dónde están. A ancianos y jóvenes matará sin miramiento. Entonces habrá entre ellos, en el país, un intenso miedo hacia él. Durante treinta y cuatro años los sojuzgará como los habían sojuzgado los egipcios y les impondrá penalidades. Y engendrará hijos que al sucederle dominarán por espacios de tiempos más breves.
A sus regiones llegarán cohortes y un poderoso rey de occidente que los someterá, los llevará cautivos y una parte de su templo a fuego quemará. A algunos crucificará en torno a su colonia.

El final de los tiempos
Tras lo cual llegarán a su fin los tiempos. En un momento terminará el segundo curso, las cuatro horas llegarán […]. Entonces reinarán entre ellos hombres malsanos e impíos, aparentado ser justos. Estos excitarán la cólera del corazón divino, pues serán hombres falsos, contentos de sí mismos, hipócritas en todos sus asuntos y amantes  de banquetes a cualquier hora del día, glotones insaciables. Dicen obrar así por justicia, pero son devoradores de los bienes  de os pobres, que como cazadores reclaman; falaces, que se ocultan para no ser reconocidos; impíos, llenos de iniquidad desde la aurora hasta la puesta del sol; gentes que dicen: “Tendremos festines y abundancia en el comer y beber, nos trataremos como si fuéramos príncipes”. Y aunque sus manos y sus mentes se ocupen de cosas impuras, su boca será grandilocuente, llegando a decir: “No me toques, no sea que me manches en la posición que ocupo”.

La persecución final por el rey de reyes terreno
Y vendrá sobre ellos un segundo castigo y una cólera como no les había sucedido desde el comienzo del mundo hasta aquel momento, en el que se suscitará contra ellos el rey de reyes de la tierra y soberano de gran poderío, que crucificará a quienes confiesen su circuncisión. Y a quienes la nieguen torturará y entregará para que aherrojados sean conducidos a prisión. Y sus mujeres serán ofrecidas a los dioses de los gentiles, y sus hijos pequeños serán operados por puericultores para que les rehagan el prepucio. Y otros entre ellos serán castigados con torturas, fuego y espada, y eran forzados a llevar en público sus ídolos, impuros como son, al igual que quienes los guardan. Y por quienes los torturan serán igualmente forzados a entrar en el lugar secreto para ellos, y con aguijones serán obligados a blasfemar injuriosamente contra la Palabra y, finalmente, contra las leyes y cuanto tengan sobre su altar.

El levita Taxo y sus siete hijos
Entonces en aquel día habrá un hombre de la tribu de Leví, cuyo nombre será Taxo, quien, teniendo siete hijos, les dirá, exhortándolos:
-Mirad, hijos míos, he aquí que ha sobrevenido al pueblo una segunda venganza cruel e impura, repetición inmisericorde y superior a la primera. Pues ¿Qué nación, qué país, o qué pueblo de los impíos respecto al Señor, que cometieron muchas abominaciones, ha sufrido tantos males como los que nos han alcanzado? Ahora, por tanto, hijos míos, escuchadme; ved, pues, y sabed que ni nuestros padres ni sus antepasados tentaron nunca a Dios de suerte que llegaran a transgredir sus mandamientos. Sabéis ciertamente que estos constituyen nuestra fuerza. Esto haremos: ayunemos durante tres días y al cuarto entraremos en una cueva que hay en el campo y muramos antes que transgredir los mandamientos del Señor de los Señores, del Dios de nuestros padres. Pues si hacemos esto y morimos, nuestra sangre será vengada ante el Señor.

Intervención celeste y fin del mundo
Entonces se manifestará su reino sobre toda su creación, entonces el diablo tendrá su fin y la tristeza se alejará con ella. Entonces será investido el Enviado, que en lo más alto se encuentra establecido, y al punto los vengará de sus enemigos. Pues se levantará el Celeste de su trono real y saldrá de su santa morada, inflamado de cólera a favor de sus hijos. Temblará la tierra, hasta sus confines será sacudida, y las altas montañas serán abatidas […]. El sol no dará luz y en tinieblas se tornarán los cuernos de la luna, se romperá y se convertirá toda en sangre, y la órbita de las estrellas se alterará. El mar hasta el abismo se retirará, las fuentes de las aguas cesarán, y los ríos quedarán eternamente secos. Pues el Altísimo eterno se alzará solo, aparecerá para tomar venganza de las naciones y destruirá todos sus ídolos.
Entonces, tu, Israel, serás feliz, montarás sobre cuello y alas de águila, y se consumarán tus días. Te exaltará Dios y te establecerá en el cielo de las estrellas, en el lugar de su morada. Contemplarás desde lo alto y verás a tus enemigos sobre la tierra; al reconocerlos te alegrarás y, dándole gracias, confesarás a tu Creador.
Y tú, Josué, hijo de Nave, guarda estas palabras  y este libro. Pues desde mi muerte y acogida hasta su llegada serán doscientos cincuenta tiempos los que habrán de producirse. Y este es el curso de los tiempos al que se adaptarán hasta que sean consumados. Yo, por mi parte, iré a dormir con mis padres. Así pues, tú, Josué, hijo de Nave, cobra ánimo, pues te ha elegido Dios para ser mi sucesor en la misma alianza.

Traducción del griego de Luis Vega Montaner.

sábado, 16 de junio de 2012

LA CARTA DE GILGAMESH


LA “CARTA DE GILGAMESH”

por Federico Lara Peinado




Carta descubierta en Sultantepe (tres ejemplares) y redactada muy probablemente en el siglo VII en algún lugar de Asiria. Se trata de un unicum, con algunos pasajes complejos y con pequeñas lagunas textuales, que dificultan una total comprensión. La perdida de parte de la primera línea, por ejemplo, impide conocer a que rey escribe Gilgamesh, considerado aquí erróneamente rey de Ur. 
Esta extraña carta, totalmente apócrifa, constituiría un ejercicio escolar no exento de ribetes irónicos.

1- A ti […], rey de […]ranunna, habla(le) así:
“Así habla Gilgamesh, rey de Ur, vástago de Kullab, criatura de Anu, (de Enlil) y de Ea, favorito de Shamash, querido de Marduk. El, que al igual que una cuerda tendida desde el horizonte hasta el cenit del cielo, domina los países en su totalidad, mientras que los reyes que ocupan sus tronos besan sus pies; rey que ata con una trailla a todos los países desde Oriente a Occidente”.
2- Lo que sigue (está dictado) por orden de Enlil, dios de las victorias.
“He reunido para enviártelos directamente 600 hombres de élite. Respecto a los grandes bloques de obsidiana y de lapislázuli, engastados de oro selecto, que son necesarios destinar para la estatua de mi amigo Enkidu, te había escrito, pero me has respondido: ´¡Nada!´”.
3- “Te escribo ahora directamente. En cuanto recibas esta carta mía para leerla, levántate y vete al país de Erish (y) llévate contigo un buen grupo de caballos, […] mil caballos blancos con manchas negras, 70.000 caballos negros con manchas blancas, 100.000 yeguas cuyos cuerpos tienen el aspecto de la madera  kanaktu de las montañas, 40.000 toros que no cesen de dar vueltas, 50.000 tiros de mulos abigarrados, 50.000 fogosos toros de pezuñas perfectas y de cuernos intactos, 20.000 potes de asfalto, 30.000 jarras de mantequilla, 80.000 jarrones de vino, 80.000 medidas de bulbos comestibles, 90.000 grandes encimeras de madera de palisandro, 100.000 asnos machos cargados de cedros, de enebro, reenvíalos a tu conveniencia y vente aquí.
4- Un bloque de oro rojizo -¡que pese 30 minas!- quiero fijarlo sobre el busto de Enkidu, mi amigo.
(Además, con) […] millares de piedras preciosas de GAZ, de jaspe, de lapislázuli, de todas clases de piedras de montaña, quiero fabricar (con ellas) un collar deslumbrante.
40.000 (barras) de aleación de plata, de estaño blanco para el tesoro real del gran señor Marduk.
90.000 talentos de hierro puro de bella cualidad, escogido, templado, seleccionado, precioso, excelente, martilleado. ¡Careciendo de paja, que el metalista haga cérvidos!
120.000 talentos de buen (cobre), puro: con el conjunto de bienes así ordenado, el metalista los utilizará para el trabajo del templo.
Un cofre nuevo, de factura original, todo cuanto haya de precioso, de exótico y que mis ojos nunca hayan visto, (ya sea) lleno o vacio.
Busca millares de hombres para el transporte y reúnelos; llena grandes barcos nuevos y desciende al Éufrates con la plata y el oro, llévalos al muelle de Babilonia para que mis ojos los vean y para que mi corazón se hiele de estupor.
5- En el supuesto de que no te vea el 15 de Tishri en la puerta de mi ciudad de Ur, juro por los grandes dioses que no pueden alterar la palabra jurada, lo juro por mis dioses: Lugalbanda, Sin, Shamash, Palil, Lugalgirra y Meslamtea, Zababa y el dios de mi señor, el “agresor”, a quien siempre honrarás el nombre, que te lo enviaré a destruir tus villas, a saquear tus palacios, (a desarraigar) tus vergeles, a fija verjas en el interior de tus canales, […] de tu ciudad fortificada que me han hablado mal […] para que en ella se instale Gilgamesh. ¡Todos estos males que no me sea imputados!
6- (Te traeré) a tus esclavos, a tus oficiales, a tus artesanos, a tus hijos, tus bienes, así como a tus descendientes a la gran puerta de Ur. A tu familia y a tí mismo os llevaré a la casa del metalista para remitirte […] talentos de cobre de doce espadas. Te hago obsequio (de ello). Escribo una tablilla.
7- Y (ante) las gentes de Ur te erigiré (una estela) con (las figuras) de dioses protectores, en la puerta exterior. Los habitantes de Ur se apresurarán para pasar cerca de ti. Envíame lo más pronto posible una respuesta a mi tablilla y ven aquí. Así tu no incurrirás en ningún castigo de mi parte”.
Mensaje de Gilgamesh, el poderoso rey que no tiene rival.

[Colofón]
8- Escrito y colacionado según su original. Escrito por Adad-mushammer, el joven aprendiz, hijo de Nergal-tukulti, escriba.
¡Quienquiera que se lleve (la tablilla), que el dios Ea, (señor del Apsu), le arrebate sus ojos! ¡Quienquiera que la busque y después la olvide, que se rápidamente […] por la mano del dios Nabu!

viernes, 15 de junio de 2012

MITOLOGIA MAYA -LA CASA DEL TRUENO-


MITOLOGIA MAYA
LEYENDAS Y CUENTOS MAYAS

LA CASA DEL TRUENO

Una iniciativa de la Universidad de Guadalajara y Fielding Graduate University



Cuentan los viejos que entre Totomoxtle y Coatzintlali existía una caverna en cuyo interior los antiguos sacerdotes habían levantado un templo dedicado al Dios del Trueno, de la lluvia y de las aguas de los ríos. Siete sacerdotes se reunían cada vez que era el tiempo de cultivar la tierra y sembrar las semillas y cosechar los frutos, siete veces invocaban sus dioses y entonaban cánticos a los cuatro vientos es decir hacia los cuatro puntos cardinales.
Los sacerdotes hacían sonar el gran tambor del trueno y lanzaban flechas encendidas al cielo. Y entonces el cielo se cubría de furiosos truenos y los relámpagos cegaban a los animales de la selva y a las especies acuáticas que moraban en los ríos.
Llovía a torrentes y la tempestad rugía sobre la cueva durante muchos días y muchas noches y había veces en que los ríos Huitizilac y el de las mariposas, Papaloapan, se desbordaban cubriendo de agua y limo las riberas y causando inmensos desastres.
Pasaron los siglos…
Hasta que un día arribaron al lugar grupos de personas que traían consigo otras costumbres, otras leyes y otras religiones.
Se decían venidos de otras tierras más allá del Mar Turquesa (Golfo de México) y tanto hombres, como mujeres y niños, tenían la característica de estar siempre sonriendo como si fueran los seres más felices de la tierra y tal vez esa alegría se debía a que después de haber sufrido mil penurias en las aguas borrascosas de un mar en convulsión habían por fin llegado a las costas tropicales, donde había de todo, tanto frutos como animales de caza, agua y un clima hermoso. Se asentaron en ese lugar al que dieron por nombre, Totonacan y ellos mismos se llamaron totonacas.
Pero los siete sacerdotes de la caverna del trueno no estuvieron conformes con aquella invasión y se fueron a la cueva a producir truenos, relámpagos, rayos y lluvias y aguaceros torrenciales con el fin de asustarlos.
Llovió mucho durante varios días y noches, hasta que alguien se dio cuenta de que esas tempestades las provocaban los siete sacerdotes de la caverna de los truenos. No siendo amigos de la violencia, los totonacas los capturaron y los embarcaron en un pequeño bajel y dotándoles de provisiones y agua los lanzaron al mar de las turquesas en donde se perdieron para siempre.
Pero ahora era preciso dominar a los dioses del trueno y de las lluvias para evitar el desastre del pueblo totonaca recién asentado y para el efecto se reunieron los sabios, los sacerdotes y gentes principales y decidieron que nada podría hacerse contra esas fuerzas, que sería mejor rendirles culto y adorar a esos dioses y rogarles fueran magnánimos con ese pueblo que acababa de escapar de un monstruoso desastre.
Y en ese mismo lugar en donde estaba la caverna y se ejercía el culto al dios del trueno, los totonacas levantaron el asombroso templo del Tajín, que en su propia lengua quiere decir lugar de las tempestades.
Y no sólo se rindió culto al dios del Trueno sino que se le imploró durante 365 días, como número de nichos tiene este monumento invocando el buen tiempo en cierta época del año y la lluvia, cuando es necesario fertilizar las tierras.
Hoy se levanta este maravilloso templo conocido en todo el mundo como la pirámide del Tajín en donde curiosamente parecen generarse las tempestades y los truenos y las lluvias torrenciales.

MITOLOGIA INCA -LA CREACION DE UIRA COCHA-


MITOLOGIA INCA
LA CREACION DE UIRA COCHA


En la nueva leyenda de la creación del mundo por Uira Cocha, posterior al mito primero de la creación del Universo para los incas, y al que sustituye definitivamente, se da al dios todopoderoso la facultad de dirigir la construcción de todo lo visible e invisible. Uira Cocha comienza su obra en las orillas del lago Titicaca, en Tiahuanaco, tallando en la piedra las figuras de los dos primeros seres humanos, de los primeros hombres y mujeres que van a ser los cimientos de su trabajo. Estas estatuas las va situando Uira Cocha en las correspondientes picaronas y, a medida que las da nombre, se animan y toman vida en la oscuridad del mundo primigenio, porque todavía no se ha ocupado el dios de dar la luz a la tierra, solamente iluminada por el resplandor del Titi, un animal salvaje y ardiente que vive en la cima del mundo, seguramente el jaguar que se entremezcla con otros animales en las representaciones totémicas de los incas y de las culturas anteriores. Este mundo de aquí todavía está en tinieblas porque Uira Cocha posterga toda su labor de erección de un mundo completo, al nacimiento de los seres humanos que van a disfrutar de él. Satisfecho con los humanos, el dios prosiguió su proyecto, ahora poniendo en su lugar al Sol, a la Luna, a las estrellas infinitas, hasta cubrir toda la bóveda celestial con sus luces. Después, Uira Cocha deja atrás Tihuanaco y se dirige al norte, camino de Cacha, para, desde allí, llamar a su lado a las criaturas que él acaba de dotar con vida propia. Al partir de Tihuanaco, Uira Cocha había delegado las tareas secundarias de la creación en sus dos ayudantes, Toca pu Uira Cocha e Imaymana Uira Cocha, quienes emprenden inmediatamente las rutas del Este y del Oeste de los Andes, para -a su paso por tan largos caminos- dar vida y nombre a todas las plantas y a todos los animales que van haciendo aparecer sobre la faz de la tierra, en una hermosa misión auxiliar y complementaria de la realizada antes por su dios y señor Uira Cocha, misión que terminan junto a la orilla del mar, para después perderse regiamente en sus aguas, una vez cumplida la tarea ordenada por el dios creador principal del Universo de los incas.

domingo, 10 de junio de 2012

MITOLOGIA GRIEGA -DOS MITOS FILOSOFICOS DE LA CREACION-


MITOLOGIA GRIEGA 
DOS MITOS FILOSÓFICOS DE LA CREACIÓN
(Hesíodo y Ovidio)

por ROBERT GRAVES



Algunos dicen que al principio reinaba la Oscuridad y de la Oscuridad nació el Caos. De la unión entre la Oscuridad y el Caos nacieron la Noche, el Día; el Erebo y el Aire.
De la unión de la Noche y el Erebo nacieron el Hado, la Vejez, la Muerte, el Asesinato, la Continencia, el Sueño, los Desvaríos, la Discordia, la Miseria, la Vejación, Némesis, la Alegría, la Amistad, la Compasión, las tres Parcas y las tres Hespérides.
De la unión del Aire y el Día nacieron la Madre Tierra, el Cielo y el Mar.
De la unión del Aire y la Madre Tierra nacieron el Terror, la Astucia, la Ira, la Lucha, las Mentiras, los Juramentos, la Venganza, la Intemperancia, la Disputa, el Pacto, el Olvido, el Temor, el Orgullo, la Batalla, y también Océano, Metis y los otros Titanes, Tártaro y las Tres Erinias o Furias.
De la unión de la Tierra y el Tártaro nacieron los Gigantes.
De la unión del Mar y sus Ríos nacieron las Nereidas. Pero todavía no había hombres mortales, hasta que, con el consentimiento de la diosa Atenea, Prometeo, hijo de Jápeto, los formó a semejanza de los dioses. Para ello utilizó arcilla y agua de Panopeo en Fócide y Atenea les insufló la vida.
Otros dicen que el Dios de Todas las Cosas —quienquiera que pudiera haber sido, pues algunos lo llaman Naturaleza— apareció de pronto en el Caos y separó la tierra del cielo, el agua de la tierra y el aire superior del inferior. Después de desenredar los elementos los puso en el orden debido, tal como está en la actualidad.
Dividió la tierra en zonas, unas muy calurosas, otras muy frías y algunas templadas; la moldeó en forma de llanuras y montañas, y la revistió con hierba y árboles. Sobre ella puso el firmamento rodante, al que tachonó con estrellas, y asignó posiciones a los cuatro vientos. Pobló también las aguas con peces, la tierra con animales y el cielo con el sol, la luna y los cinco planetas. Finalmente, hizo al hombre —quien, único entre todos los animales, alza su rostro hacia el cielo y observa el sol, la luna y las estrellas—, a menos que sea cierto que Prometeo, hijo de Jápeto, hizo el cuerpo del hombre con agua y arcilla, y que el alma le fue proporcionada por ciertos elementos divinos errantes que habían sobrevivido desde la Primera Creación.

sábado, 9 de junio de 2012

MITOLOGIA BABILONIA -HIMNO A ISHTAR (I)-


MITOLOGIA BABILONIA
HIMNO A ISHTAR (I)

Por Federico Lara Peinado 





¡Cantad a la diosa, la más augusta de las diosas!
¡Glorifíquese a la dueña de los pueblos, la más grande de los Igigu!
¡Cantad a Ishtar, la más augusta de las diosas!
¡Glorifíquese a las dueñas de las mujeres, la más grande de los Igigu!
5 – Ella, (que es) toda alegría, está revestida de amor,
Está henchida de seducción, encanto y voluptuosidad.
Ishtar, (que es) toda alegría, está revestida de amor,
Está henchida de seducción, encanto y voluptuosidad. 
Dulce es de labios, su boca es la vida;
10 – Las risas se alegran (a la vista de) su aspecto;
Es espléndida; perlas reposan sobre su cabeza,
Son hermosos sus colores, cambiantes y brillantes son sus ojos.
¡La diosa! Junto a ella hay consejo;
Tiene la suerte de todas las cosas en su mano;
15 – A su mirada se crea el bienestar.
La prestancia, la Protección y el Espíritu guardián.
Ama la inteligencia, el mutuo amor, el bien;
Es ella quien rige la concordia.
La joven que ella ha elegido encuentra en ella una madre.
20 – Se la menciona entre las gentes, se la invoca.
¿Quién puede igualar su grandeza?
Sus secretos son poderosos, eminentes y esplendidos.
A Ishtar en su grandeza ¿Quién la puede igualar?
Sus secretos son poderosos, eminentes y esplendidos.
25 – Entre los dioses, sin igual es su lugar;
Su palabra es de categoría, es suprema sobre ellos;
Ishtar, entre los dioses, sin igual es su lugar;
Su palabra es de categoría, es suprema sobre ellos.
Es su reina; ellos se aconsejan con sus dichos;
30 – Todos se arrodillan ante ella;
Reciben de ella su iluminación;
Mujeres y hombres la temen.
En su asamblea lo que ella dice es dominante, supremo;
Se sienta entre ello como Anu, su rey;
35 – Su sabiduría (está hecha) de entendimiento, de listeza, de sabiduría;
Se aconsejan juntos, ella y su esposo (aquí Anu).
Residen juntos en el trono divino,
En el alto templo, mansión de la alegría;
Entre ellos, los dioses ocupan sus lugares,
40 – (Y) prestan su atención a lo que dicen sus bocas.
El rey, su favorito, el bienamado de sus corazones,
No cesa de ofrecerles con magnificencia su sacrificio puro.
Ammiditana (rey babilonio 1683-1647 a. de C.), como sacrificio puro de sus manos,
Les ha dado, hasta la saciedad, grasos toros y corderos.
45 – A Anu, su esposo, (Ishtar) le pidió para él
Una vida perdurable y larga.
¡Muchos años de vida para Ammiditana
Ishtar (le) ha concedido, (le) ha otorgado!
Por medio de su orden ella (le) ha sometido
50 – Las cuatro regiones a sus pies,
Y la totalidad de todos los lugares habitados
Los ha sujetado a su yugo.
El objeto de sus deseos, el canto que la embelesa,
Es lo que conviene a su boca; él ejecutó para ella la orden de Ea,
55 – (Que) la oyó glorificarla y se alegró por su causa.
“¡Que él viva y que su rey la ame para siempre!”
¡Oh Ishtar, a Ammiditana, el rey que te ama, dale una larga y perdurable vida!
¡Que él viva!

sábado, 2 de junio de 2012

MITOS HEREOS -NACIMIENTO DE ESAU Y JACOB-


MITOS HEBREOS 
NACIMIENTO DE ESAÚ Y JACOB

POR ROBERT GRAVES y RAPHAEL PATAI



Cuando Isaac rogó a Dios que eximiese a Rebeca de la maldición de esterilidad durante veinte años, ella concibió inmediatamente dos mellizos. Pronto comenzaron a pugnar el uno con el otro en el seno materno, con tanta violencia que Rebeca deseaba morir, pero Dios la tranquilizó con estas palabras: "Dos pueblos llevas en tu seno; dos pueblos que al salir de tus entrañas se separarán.
Una nación prevalecerá sobre la otra nación y el mayor servirá al menor" Llegó el tiempo del parto y salieron del seno de Rebeca dos mellizos. "Salió primero uno rojo, todo él peludo, como un manto, y se le llamó Esaú. Después salió su hermano, agarrando con la mano el talón de Esaú, y se le llamó Jacob... Crecieron los niños y fue Esaú diestro cazador y hombre agreste, mientras que Jacob era hombre apacible y amante de la tienda.".
Algunos dicen que el color del cabello de Esaú significaba inclinaciones sanguinarias; y que Jacob fue concebido antes que él , pues si se introducen dos perlas en un frasco estrecho, la primera que entra es la que sale la última.
Siempre que Rebeca pasaba por delante de un templo cananeo durante su embarazo, Esaú se esforzaba por salir; siempre que pasaba por delante de una casa de oración justa, Jacob hacía lo mismo. Pues había dicho a Esaú en el seno materno: "El mundo de la carne, hermano mío, no es el mundo del espíritu, En uno se come y bebe, se casa y se procrea, en el otro no hay esas cosas. Dividamos los mundos entre nosotros. Toma el que prefieres".
Esaú se apresuró a elegir el mundo de la carne.
Otros dicen que Samael ayudó a Esaú en su lucha prenatal; y Miguel ayudó a Jacob; pero Dios intervino en favor de Jacob y lo salvó de la muerte. Pero Esaú desgarró tan cruelmente el útero de Rebeca que ésta no pudo volver a concebir. De lo contrario Isaac habría podido ser bendecido con tantos hijos como Jacob.
Jacob nació circunciso, como solamente otros doce santos, a saber: Adán, Set, Enoc, Noé, Sem, Téraj, José, Moisés, Samuel, David, Isaías y Jeremías; aunque algunos agregan a Job, Balaam y Zorobabel. Isaac circuncidó a Esaú a la edad de ocho días, pero años después se sometió a una dolorosa operación que lo hizo padecer como si nunca se hubiera circunciso.
Al principio la diferencia entre los mellizos no era mayor que la que hay entre un retoño de mirto y un retoño de espino.
Pero después, mientras Jacob estudiaba piadosamente la Ley, Esaú comenzó a frecuentar los templos cananeos y a realizar actos de violencia. Antes de cumplir los veinte años de edad ya había cometido delitos de homicidio, violación, robo y sodomía. En consecuencia, Dios encegueció a Isaac, lo que lo preservó de los reproches silenciosos de los vecinos.

viernes, 1 de junio de 2012

MITOLOGIA GRIEGA -EL MITO OLIMPICO DE LA CREACION-


MITOLOGIA GRIEGA 
EL MITO OLÍMPICO DE LA CREACIÓN



por ROBERT GRAVES



En el principio de todas las cosas la Madre Tierra emergió del Caos y dio a luz a su hijo Urano mientras dormía. Contemplándola tiernamente desde las montañas, él derramó una lluvia fértil sobre sus hendiduras secretas, y ella produjo hierbas, flores y árboles, con los animales y las aves adecuados para cada planta.
La misma lluvia hizo que corrieran los ríos y llenó de agua los lugares huecos, creando así los lagos y los mares.
Sus primeros hijos de forma semihumana fueron los gigantes de cien manos llamados Enarco, Giges y Coto. Luego aparecieron los tres feroces Cíclopes de un solo ojo, constructores de murallas gigantescas y maestros herreros, primeramente de Tracia y luego de Creta y Licia, a cuyos hijos encontró Odiseo en Sicilia. Se llamaban Brontes, Estéropes y Arges, y sus espíritus han vivido en las cavernas del volcán Etna desde que Apolo los mató en venganza por la muerte de Asclepio.
Los libios, sin embargo, pretenden que Garamante nació antes que los cíclopes de cien manos y que, cuando surgió de la llanura, ofreció a la Madre Tierra un sacrificio de bellotas dulces.

MITOLOGIA GRIEGA -LOS MITOS HOMERICO Y ORFICO DE LA CREACION-


MITOLOGIA GRIEGA 
LOS MITOS HOMÉRICO Y ÓRFICO DE LA CREACIÓN


por ROBERT GRAVES



Algunos dicen que todos los dioses y todas las criaturas vivientes surgieron del Océano que circunda al mundo y que Tetis fue la madre de todos sus hijos.
Pero los órficos dicen que la Noche de alas negras, diosa por la que incluso Zeus sentía un temor reverente, fue cortejada por el Viento y puso un huevo de plata en el seno de la Oscuridad; y que Eros, a quien algunos llaman Fanes, salió de ese huevo y puso el Universo en movimiento. Eros tenía doble sexo y alas doradas y, como poseía cuatro cabezas, a veces mugía como un toro o rugía como un león, y otras veces silbaba como una serpiente o balaba como un carnero. La Noche, que le dio el nombre de Ericepayo y Protógeno Faetón vivía en una cueva con él y se manifestaba en forma de tríada: la Noche, el Orden y la Justicia. Delante de esa cueva se sentaba la ineludible madre Rea, tocando un tambor de latón para captar la atención de los hombres sobre los oráculos de la diosa. Panes creó la tierra, el cielo, el sol y la luna, pero la diosa triple gobernó el universo hasta que su cetro pasó a Urano.